Trastorno de personalidad múltiple:
consiste en la presencia de dos o más identidades o estados de personalidad
(cada una con un patrón propio y relativamente persistente de percepción,
interacción y concepción del entorno y de sí mismo). Al menos dos de estas
identidades o estados de personalidad controlan de forma recurrente el
comportamiento del individuo y están asociadas con un grado de pérdida de
memoria (más allá de la falta de memoria normal). A esta pérdida de memoria se
le conoce con frecuencia como tiempo perdido o amnésico.
Las personas diagnosticadas con un trastorno de la personalidad pueden
tener alteraciones en la cognición, emotividad, funcionamiento interpersonal o en el control de impulsos. En
general, los trastornos de personalidad se diagnostican al 40-60% por ciento de
los pacientes psiquiátricos, y representa el diagnóstico psiquiátrico más frecuentes.
También son un grupo de afecciones de salud mental en las cuales una persona
tiene un patrón prolongado de comportamientos, emociones y pensamientos que es
muy diferente a las expectativas de su cultura. Estos comportamientos
interfieren con la capacidad de la persona para desempeñarse en las relaciones
interpersonales, el trabajo y otros escenarios.
En conclusión, este síndrome es causado por en evento que pudo causar un daño psicológico o físico en la persona durante su infancia, para escapar de ese momento traumático la mente realiza un personaje que podrá soportar cuyo trauma y defenderse por si solo. Habitualmente cada personalidad que adopte una persona tiene un nombre propio.